Eduardo De Lillo “La idea que siempre manejamos es tratar de ofrecer aumentos que podamos pagar"

El Secretario de Hacienda, Eduardo De Lillo repasó la situación financiera del municipio destacando que el municipio ya no tiene ninguna deuda con respecto a 2020, la buena respuesta de los contribuyentes y brindó más precisiones con respecto al aumento otorgado a los empleados municipales.

En principio, De Lillo señaló a Radio del Centro: “La idea que siempre manejamos es tratar de ofrecer aumentos que podamos pagar sin poner en riesgo las finanzas municipales”.

“Los funcionarios públicos debemos tratar de tomar medidas que brinden certezas a la gente (contribuyentes, proveedores y empleados municipales). Si agregamos incertidumbre no estaremos cumpliendo con nuestra función”, puntualizó.

A este respecto, el funcionario consideró: “Es fácil hacer demagogia y ofrecer cosas que sabemos no podemos cumplir para después vaya a saber cómo resolverlo”.

“En las primeras oportunidades que dialogamos con la Federación, ofrecíamos 10 y nos pedían 25, por lo tanto planteaba si querían que les prometa un sueldo que no iban a cobrar o querían cobrar. Si quieren cobrar puntualizaba aquello que sí podíamos pagar”, planteó De Lillo.

Asimismo, comentó: “De hecho habíamos creado incluso un fondo anticíclico para poder mantener la certeza con la gente, una medida de gobierno consensuada con el intendente, lejos de pensar que en medio tendríamos una pandemia”.

“En abril del año anterior tuvimos una disminución de 43 millones de pesos en la coparticipación y en el mes de mayo un poco menos, parcialmente se compensó pero en 23 millones sobre 60 millones menos que se enviaron”, mencionó De Lillo, y resaltó: “Nadie se dio cuenta porque el empleado público siguió cobrando en la misma fecha, el proveedor continuó cobrando y no faltó ni un solo insumo para atender toda la pandemia, esta situación sanitaria desgraciada que estamos atravesando. Se logró merced a ese amortiguador económico que tenemos armado para tratar de dar respuesta”.

“De nada sirve decirle a fin de mes a un empleado no te puedo pagar el sueldo porque bajó la coparticipación debido a que es un problema mío no del empleado”, precisó, y agregó: “No podemos transferir la angustia de una administración al sector más débil como son los trabajadores, tampoco al proveedor”.

Acto seguido, esbozó: “Es una tarea diaria, la gente tiene la certeza que a fin de mes cobra y seguramente a más de uno no le alcance el dinero pero Chivilcoy no es una isla en relación a aquello que ocurre en el país”.

No obstante, esgrimió: “tan malo los sueldos que pagamos no deben ser porque no se va nadie, al contrario, tenemos más de mil pedidos de personas que quieren ingresar pero que lógicamente no podemos tomar”.

A continuación, De Lillo enfatizó: “La semana próxima estaremos en cero deuda con proveedores del año 2020, no se deberá un solo peso del año anterior. Cuando el actual intendente asume hace cinco años eran más de más de 40 millones de pesos que se debían del año 2015. Si hoy cambiase el intendente se encontraría que no tendría deuda para abonar de años anteriores”.

“Todo sirve para que además podamos comprar más barato y si podemos comprar más barato se pueden brindar mejores servicios a la comunidad. Entendemos que se trata de una cadena virtuosa, se negocia de una forma distinta”, consignó el secretario.

E indicó: “Pudimos adquirir los camiones de basura porque al proveedor le manifestamos que teníamos el dinero en mano debido a que en este momento no hay camiones en el país, queremos comprar alguna ambulancia y nos cuesta conseguir, pero aquello que se consiga será con plata en mano”.

“En las últimas licitaciones tuvimos ofertas por debajo de los valores precotizados. En la licitación de las luces LED estuvimos más de 2 millones por debajo, valores del orden de más del 10 por ciento que es mucho dinero y nos permite comprar mayor cantidad de luminarias”, sostuvo.

A este respecto, remarcó: “En tres años que estoy en el municipio nunca llegó uno de ‘los famosos’ ATN, que son habituales en la atención económica de las municipales y de los gobiernos en forma discrecional que a veces suelen dar. En nuestro caso, no pedimos ninguna ayuda económica, ni nos ofrecieron, ni nos dieron”.

“Vivimos en Argentina y tenemos que acomodarnos, asimismo acostumbrarnos a resolver situaciones, teniendo que estar encima todos los días para observar hacia dónde va la economía. No es fácil mantener la situación en movimiento sin inconvenientes”, advirtió.

Además, De Lillo valoró: “Estamos absolutamente agradecidos por la respuesta de la gente, no tuvimos inconvenientes con los cambios que hicimos este año, no recibimos queja alguna y nos tranquiliza porque el primer año hubo que reacomodar muchos aspectos que a nuestro juicio no estaban bien, sabiendo que los contribuyentes realizaron un esfuerzo que este año hicieron”.

“El aumento está por debajo, incluso del impuesto inmobiliario de la provincia, en el caso de la tasa vial el productor agropecuario comprobó que el índice desarrollado lo beneficio en gran parte”, espetó.

También, espeficó: “La recaudación fue buena, se recuperaron muchos contribuyentes y es lo que interesa al municipio, no tenemos ningún interés de hacer juicio a nadie y pedimos por favor que se acerquen, pueden pagar o no. Si no pueden pagar buscamos la manera de resolverlo, se hará una condonación de la deuda o eximición de las futuras tasas”.

“El bono lo mantendremos para el sueldo bruto menor a $ 30 mil porque si no lo hacemos el aumento que damos no significará nada. El aumento a las personas rezagadas será superior en relación al resto del personal”, subrayó el funcionario, para cerrar explicó: “El aumento es 10 por ciento en marzo, 7 por ciento en mayo, 7 por ciento en julio y 7,2 por ciento en septiembre, acumulativo”.