Altamiranda:“Notamos que desapareció la patología deportiva, la traumatología deportiva bajó a cero"
El Dr. Daniel Altamiranda, médico traumatólogo, es tesorero de la Asociación Civil de Medicina del Deporte de la Provincia de Buenos Aires (AMDBA).
En una entrevista que concedió a ‘La Mañana del Centro’, el profesional de la salud en relación al nacimiento de la AMDBA, advirtió:
“Los médicos y quienes estamos relacionados con la salud y el deporte empezamos a notar que varias opiniones provenían de personas que no tenían demasiada preparación o conocimiento en relación a cómo actuar con el deporte, la salud y la pandemia”.
“El esfuerzo de muchos profesionales hace que se forme la Asociación Civil de Medicina del Deporte de la Provincia de Buenos Aires que incorporó a muchísimos profesionales de renombre a nivel nacional, participando personas de varias provincias”, comentó.
Asimismo, agregó: “En forma virtual concretamos una asociación civil de la que estamos haciendo la personería jurídica y no solamente son médicos sino también profesores de educación física, entrenadores, kinesiólogos, médicos clínicos”.
“Presenté a un amigo personal como es el Dr. Martín Alvarez quien se encargó de hacer la personería jurídica de esta asociación que se encuentra en trámite y el mencionado abogado es nuestro asesor letrado”, manifestó Altamiranda al mismo tiempo que exclamó: “Se trata de una asociación con ganas de trabajar y con objetivos claros”.
“De hecho, ya estamos trabajando en el asesoramiento a municipios, a clubes, a diferentes establecimientos educativos, a institutos”, mencionó, y añadió: “brindamos conferencias para la Agrupación de Directores Técnicos que dirige Ricardo Caruso Lombardi, nos contactamos con los directores técnicos de La Pampa asimismo Centro y Sur de la Provincia de Buenos Aires, fui convocado por la Universidad de San Luis y en noviembre brindaré una conferencia sobre médico de equipos”.
“No solamente la parte traumatológica integra un cuerpo médico de clubes sino los psicólogos que asesoran, realmente es bastante abarcativo y se conformó una fuente de conocimiento bastante amplia que afortunadamente está siendo utilizada”, señaló.
“No observamos un movimiento de la Dirección de Deportes que haya brindado normas hacia los clubes y únicamente se basan en aquello que baja la Provincia”, dijo, e indicó: “Así que seguramente, haya contactos con las direcciones locales para ofrecer todos los servicios que la asociación tiene de capacitaciones o asesoramiento fundamentalmente a cómo manejar el deporte en este período de pandemia y pos pandemia, teniendo en cuenta que aparenta ser largo”.
“Ese dinero que los clubes están utilizando para hacer un cerramiento se contrapone a la actividad física que es una forma de ganar salud. Los clubes se están cerrando en lugar de abrirse, de expandirse, de utilizar esos sectores de salud física y psicológica”, subrayó.
En tal sentido, consideró: “A mi criterio y el de la Asociación, esos espacios deben abrirse con protocolos, con cuidados y convocar nuevamente a su población para empezar a trabajar mucho más rápido en relación a aquello que se está haciendo”.
“La asociación a través de gente muy capacitada puede asesorar y acercar ideas que siento sería muy bueno que puedan escucharse. Teniendo en cuenta que se sumaron muchísimos profesionales de la salud a esta asociación”, consignó Altamiranda.
En relación al trabajo particular, el traumatólogo espetó: “Nuestro consultorio estuvo cerrado durante el lapso de tiempo que el estado así lo dispuso. Después permaneció siempre abierto hasta el momento, con el protocolo correspondiente”.
“Notamos que desapareció la patología deportiva, la traumatología deportiva bajó prácticamente a cero. Además, la población está con miedo y no concurre a las instituciones privadas de salud ni tampoco a las públicas porque tiene temor de hacerlo”, remarcó.
“Muchas personas al no poder movilizarse hicieron a un lado la salud, el control cardiovascular, clínico, renal, ginecológico para otro momento y aún continuamos en la misma tesitura”, precisó, y puntualizó: “Los consultorios privados están abiertos, pero las personas no concurren a excepción de casos de extrema necesidad”.
Además, Altamiranda sostuvo: “Mucha gente utiliza la natación como terapia de ciertas patologías como una sifosis, una escoliosis, un acortamiento muscular, una patología del hombro y esos pacientes durante siete meses no pudieron concurrir a la pileta”.
“Los músculos que deben trabajarse para la escoliosis permanecieron quietos durante siete meses, no estuvo contemplada esa patología y tendría que haberse hecho un protocolo de trabajo para permitir que esos pacientes tengan asistencia a los natatorios también para que éstos no se fundan”, enfatizó.
Por último, aseveró: “No se cubrió a mi criterio esa etapa y únicamente menciono los natatorios porque después se puede hablar largo y tendido de los gimnasios, son centros de salud que fueron abandonados igualmente que los clubes que representan los lugares de mayor contención. De esta situación se sale con aperturas y con trabajo”.