“El laboratorio saca una foto actual de la persona y con un análisis el médico va descartando patologías”
La bioquímica, Alicia Gatti, nos contó el por qué de la elección de la profesión que desempeña y la evolución que fue teniendo en la faz profesional. Entrevistada en Radio del Centro se refirió a la diferencia de trabajar en la faz privada y la pública como profesional, ser técnica además de bioquímica para manejar los aparatos tecnológicos actuales que ayudan a agilizar el trabajo y poder atender una mayor cantidad de personas.
Asimismo, destacó la importancia de las prácticas ante una carrera que principalmente es teórica como asimismo la capacitación para adaptarse a los cambios que se fueron produciendo con el correr de los años.
-¿Por qué decidió estudiar para convertirse en bioquímica?
-Vengo de un hogar de clase media, mi mamá era maestra, mi papá chacarero pero una prima que tengo era bioquímica, trabajaba en la UBA y como siempre fui curiosa buscando entender distintas cosas que ocurrían y que mi mamá no podía responderme el por qué, tenía a mi prima para que me contara. Me gustaban más las cosas artísticas que las científicas por una cuestión de estímulo en casa como cantar, bailar, tocar algún instrumento.
No obstante, después de terminar la Secundaria en el Nacional di el examen de ingreso y tuve que cambiar mi manera de estudiar debido a que la carrera que elegí es más de razonamiento. A medida que fui avanzando en la carrera me fue gustando más y como está relacionada con la salud, de hecho cuando estudié estaba orientada a la salud sin tener otra salida más que la docencia universitaria. Luego, ingresé a un hospital, me capacité, hice una especialidad y retorné a Chivilcoy.
-¿Cómo define a la carrera?
-Se trata de una carrera con mucha formación teórica pero poca formación práctica y la parte práctica cuando hay que trabajar de manera individual, armar un laboratorio es complicado a los 23 y 24 años si no que me quedé el tiempo que pude y pude entrar a un hospital como concurrente pasando por varios sectores que son especialidades de la profesión tanto la que más me gustaban o las que menos sabía. Asimismo, trabajé en laboratorios privados para entender la gestión que es completamente distinto a estar en un Hospital que en un laboratorio privado donde ya tenés que saber de números, de comprar, ocuparse de otros aspectos que en un nosocomio público no hay necesidad.
Tengo entendido que actualmente, la carrera obliga a hacer una pasantía de 20 días o un 1 mes donde en el hospital recibíamos estudiantes y realmente es importante tener una pasantía porque en 1° Año nos enseñaban fundamentos de funcionamiento de los aparatos pero nunca habíamos estado en un Laboratorio y cuando se llega a 5° Año ya no nos acordábamos más de lo que habíamos estudiado, necesitábamos ponernos en condición de trabajo y por eso, las residencias bioquímicas que después aparecieron con dos años más la tercera si será jefe de residentes donde se está en una formación con trabajo asistencial.
-¿La tecnología ayudó a mejorar el trabajo?
-Esta clase de carreras lo que tienen y de hecho lo hice, cada 5 años si no nos capacitamos ni actualizamos se pierde la información de la Facultad y cuando me recibí el trabajo era artesanal, se contaban los glóbulos rojos, teníamos una camarita de vidrio donde nos enviábamos al microscopio, se nos cansaba la vista y si trabajábamos mucho teníamos que parar, tomar un poco de aire y regresar. Estábamos todo el día para atender a 5 o 6 pacientes aunque en el transcurso de los últimos 40 años se llegó, más despacio que otros países pero se alcanzó, al acceso de la tecnología y todo el desarrollo que tuvo la ciencia médica aplicada a la salud. Cuando se logra acceder a la tecnología cambiamos y teníamos tiempo para otras prestaciones debido a que los aspectos rutinarios los hace la maquina ahora aunque debemos saber cómo controlar los equipos, mirar, recalibrar e incluso a veces parecemos más ingenieros que bioquímicos. Cuando se nos tapa un aparato y al no tener técnicos en Chivilcoy para esta clase de equipos hay que ir a los tutoriales de You Tube, por eso tenemos herramientas en los laboratorios o conectamos el aparato en cuestión a Internet para que el técnico nos vaya guiando donde si hay que cambiar un repuesto se acercan y lo cambian o en su defecto, nos lo envían e indican la manera de cambiarlo. Así que, contamos con destornillador de relojería, una linterna en la cabeza para introducirnos en el aparato.
Con un hemograma tardaba una hora pero ahora en 5 minutos está con un montón de parámetros y mucho más exacto que cuando lo hacíamos de forma artesanal pero cuando el equipo que trabaja con sangre se tapa o se terminó el reactivo para reponer los líquidos, la jornada se complica debido a que no se puede solucionar porque perdimos la tarea artesanal. En el año 2001 no había repuestos, no había mantenimientos así que volvimos al método artesanal en el hemograma para contar los glóbulos de a uno teniendo que enseñarle a los bioquímicos jóvenes cómo se hacía ese trabajo.
-¿Cuán importante es la capacitación?
-En otras épocas paraba una semana, cerraba el laboratorio, me iba a un Hotel, hacía un curso presencial pago aunque ahora ya no se puede hacer más aunque merced a la pandemia las instituciones se organizaron para hacerlos a distancia, que no es lo mismo porque se pierde ese contacto con un profesional que sabe más o tiene otra realidad pero de última se puede acceder a la capacitación, caso contrario, nos quedamos afuera debido a la velocidad con la que avanza todo.
En ocasiones, considero que manejamos información que al médico no le llega si éste no fue también actualizándose. En tal sentido, hay profesionales quienes sostienen que un laboratorio aporta el 80% de la información que maneja un médico y de ahí que debemos hacer las cosas bien aunque estando a la altura de los tiempos que corren.
-¿El laboratorio y su incidencia en materia de salud?
-El laboratorio saca una foto actual de la persona donde hay cosas que vienen por arrastre y otras que aparecen, pero con un análisis el médico va descartando patologías. Muchos pacientes nos preguntan al retirar un análisis si los resultados dieron bien, en este caso deben ir al médico porque va descartando patologías a partir de los análisis que solicita.
Cuando abrí mi propio laboratorio trabajaba poco así que comencé también a trabajar en relación de dependencia en bromatología, en algún momento me ofrecieron tomar la guardia privada del Sanatorio y no me animaba a hacer todo. Pese a que es difícil apostar solamente a un trabajo en este país, igualmente renuncié a bromatología donde mi tarea consistía en análisis de agua que también estaba relacionada a la salud pero más con el medioambiente, análisis de leche aprendí a hacer aunque me fui al Sanatorio. En la presidencia de Menem que teníamos un montón de tecnología pero no trabajo, ingresé al Hospital en esa época debido a que si bien me inicié como privada es difícil sostener la actividad con precios que no podemos cobrar por cuenta propia si no que los pone el estado o un sindicato de la misma manera que el sueldo de una empleada. Trabajando en el ámbito privado tuve etapas muy buenas y otras donde solicité empleo al estado donde como empleada pública di más de lo que recibí aunque en ese momento lo precisé para vivir.
-¿Cómo desempeñó la profesión en pandemia?
-Los test rápidos te sacan de un apuro pero siempre me sostuve durante la pandemia en dos días de síntomas debido a que la gente ansiosa ante un sintomatología quería hisoparse cuanto antes y le arrojaba resultado negativo. En nuestro laboratorio el análisis se pagaba y si por apuro hacíamos el hisopado, arrojaba resultado negativo y se le complicaba la salud, el médico iba a solicitar otro hisopado e iba a tener que abonarlo otra vez. Con el dengue también sucede lo mismo y esperar la cantidad de días recomendada de sintomatología porque los reactivos están hechos para una concentración del bichito o anticuerpos que detecta relacionado al tiempo de evolución. A veces cuesta más caro ir un laboratorio pero no solamente consiste en un análisis si no en la preparación del paciente, la oportunidad, el horario, la privacidad y las pruebas tienen valor cuando dan positivo.
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