Es un desafío todos los años, lo que no quiero es fallar y poder tener el galpón lleno de animales

La 70º Exposición Ganadera, Industrial y Comercial a realizarse desde el 5 hasta el 11 de septiembre contemplará también la 23º Exposición de Granja.

Con la intención de conocer detalles de la Expo de Granja 2022, entrevistamos en Radio del Centro al referente del área que es Eduardo Torrusio, criador y además juez.

-¿Cuánto hace que viene organizando la Expo de Granja?

-Llegamos a la 23º Exposición de Granja y dentro de esa cantidad de años transcurridos en nuestra Exposición principal hace 20 que estoy junto a ella, ya es una costumbre y extrañábamos mucho después de la pandemia volver nuevamente a organizarlas.

Además de ser criador y organizar exposiciones, soy jurado de clasificación y estuve en distintas exposiciones que arrancaron por el mes de junio. Ya son varias las que vienen llevándose a cabo y con muy buena concurrencia, la presencia de muchos criadores nuevos, el año viene desarrollándose muy bien con respecto a la actividad y realmente nos hacía falta.

-¿Qué se puede encontrar la gente en una exposición de granja?

-En una exposición como la de Chivilcoy, habrá distintas clases de variedades de razas de gallina porque después tenemos los Bantam, que llamamos a los pigmeos. Entiendo que en Chivilcoy tendremos algunos patos que no solemos ver como asimismo alguna gallina de Guinea, muchas variedades de conejos.

En relación a Bantam tendremos mucha variedad de colores; la expo tendrá un colorido muy lindo.

Habitualmente se acostumbra a observar una mascota en algunos lugares que son más ‘universales’ y en la muestra se encuentran con diversidad de colores, largos de pelo, conejos más de pelos que de carne y para la parte de mascota como un Dutch que entra en la palma de la mano como un gigante de 14 o 15 kilos más la diversidad de colores.

-¿El cuidado de los animales?

-El cuidado es parecido al de un deportista; como quien maneja la colombófila sabe la manera de cuidar a sus animales, el criador de aves de raza también pone todo lo mejor para que a la hora de la presentación ese animal esté en todo su esplendor, es una fiesta y el animal, como a mí me enseñaron hace muchos años, debe estar acorde a las circunstancias. Nos esmeramos mucho para lo que nos gusta presentar bien cada animal puliendo hasta el último detalle como el baño, el secado, el preparado de las plumas y todas esas cuestiones.

Un plan sanitario cuesta muy caro, un anillo de identificación también está caro, son 9 meses detrás del animal antes de presentarlo a una exposición.

-¿Criadores de qué ciudades concurrirán?

-Tengo la confirmación de criadores mendocinos, también del Sur del país, de Córdoba, de la mayoría de ciudades que componen la Provincia de Córdoba. Siempre tenemos un espacio reducido en Chivilcoy para la muestra no por el lugar que es amplio y se puede pero lo que sucede es que existe mucha cantidad de criadores para albergar en una exposición grande como me tocó ir en julio a la sede Rauch donde había casi 1000 animales y se torna bastante inmanejable la logística.

Anteriormente contábamos con un transporte que llevaba a los animales y devolvía a su lugar de origen pero ahora por una cuestión que debe llevar su propio criador contamos con una complicación en el manejo del animal del criadero hacia la exposición. Por lo tanto, nos limitamos y tratamos de traer casos puntuales con personas que vienen a Chivilcoy y se quedan, buscamos la vuelta por ese lado principalmente.

Además, en la exposición de Rauch éramos 8 los jueces para realizar la jura de los 1000 animales, se estima que una persona puede juzgar alrededor de 200 animales por día haciendo las cosas bien porque lleva mucho tiempo, 10 a 15 minutos para revisarlo de pies a cabeza.

-¿Qué se toma en cuenta al juzgar a un animal?

-Tenemos un estándar al que acudimos y lo llevamos incorporado en nuestra cabeza para en siete animales de la misma raza buscar a ese que más acorde se encuentre al estándar: desde el pico hasta las uñas hay un rango de puntos a seguir para evaluar. A grandes rasgos evaluamos como lo hace un jurado de clasificación en Palermo con un animal grande y tratamos en el menor tiempo posible cometer pocos errores entre las plumas rotas, descalificaciones como dedos torcidos o algún brote en la cresta.

-¿Cómo conviven el criador y el juez?

-Todos no tenemos los mismo gustos porque un animal tiene un determinado color y sin embargo, no todos los jueces observamos ese color y ese animal de la misma manera. En el juzgamiento sucede, hay razas con siete colores y no necesariamente la observamos de la misma forma o compartimos un poco el juzgamiento el tema de los gustos donde nos salimos del estándar en sí. Como arranqué de criador trato de criar ante todo de la forma que a mí me agrada pero conscientes también que el animal esté acorde al estándar, en la crianza está repartido ese proceso entre lo que quiero y aquello que necesito para convencer al jurado de una competencia.

Después está la cuota de suerte, que en ese momento al jurado le haya gustado nuestro animal, que esté bien presentado y ese día como cualquiera de nosotros, se haya levantado motivado para estar en su esplendor cuando es observado por el jurado. Puede ocurrir que se encuentre estresado y ese día no esté muy arriba.

-¿Se cría para competir y para vender?

-Hay criadores que solamente compiten por la copa, el trofeo, la medalla y hay otros de 700 u 800 animales que buscan su remuneración porque un animal bueno actualmente se remunera muy bien. A mí me gusta más la competencia y la distinción, lo tomo como un hobby pero para otros criadores es una cuestión comercial y a algunos les va muy bien económicamente, no puedo decir que es su único medio de vida pero sí una ayuda importante.

-¿Los precios son buenos?

-Este año sucedió que hubo precios exuberantes en remates interesantes con mucho público, interesados por la misma raza, pujas importantes para una gallina porque puede costar incluso hasta $ 300 mil. Son casos puntuales, pero están.

En las exposiciones hay ventas y es más, los remates ya son filmados similares a los de ganado. Hay números marcados, van pasando en la pantalla los animales, se modificó mucho porque cuando arrancó la actividad se hacían ventas particulares por jaula y este año en Chivilcoy también tendremos remate que es bueno para el productor que llega con una base de $ 4 o $ 5 mil puede sacar hasta $ 8 o $ 10 mil con la puja.

-¿La diagramación de la Expo de Granja?

-El ingreso de los animales será entre el miércoles y el jueves, el viernes será la clasificación, mientras que, el sábado ya con todos los premios otorgados queda libre la muestra al público en general para que pueda observarla y el remate será el domingo alrededor de las 14 para luego llevar a cabo la venta particular.

-¿Cómo toma la organización?

-Es un desafío todos los años porque lo que menos quiero es fallar en nada y poder tener el galpón lleno de animales, que el criador esté conforme y se vaya con ganas de retornar al próximo año, la persona que haya comprado el animal no tenga inconveniente alguno. Quiero que la exposición me brinde satisfacciones y se trabaja en consecuencia, además este año será como el primero.