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Federico Díaz: “La verdad que no nos esperábamos tantos halagos y agradecimiento"

Federico Díaz


“La verdad que no nos esperábamos tantos halagos y agradecimientos porque salimos a cumplir con nuestro deber”



Después de la tarea desempeñada por nuestros Bomberos Voluntarios, de Chivilcoy y de Moquehuá, para ayudar a combatir los incendios en la Provincia de Corrientes, el Departamento Deliberativo incluyó en el Orden del Día de la Sesión Pública del miércoles 23 de marzo, un proyecto de ordenanza para declarar de interés pública municipal la labor desempeñada por nuestros servidores públicos en la provincia norteña.

Después de las palabras, y del voto unánime de todos los ediles para declarar de interés general la labor de nuestros servidores públicos, se entregó un reconocimiento a los servidores públicos.

Uno de los cuatro Bomberos Voluntarios de Chivilcoy que estuvo en la provincia de Corrientes prestando colaboración para combatir los incendios fue el 3º oficial del Cuerpo Activo, Federico Díaz.

Al dialogar con Radio del Centro se refirió a los reconocimientos y recordó la labor realizada en la provincia litoraleña.


Reconocimientos


Obtuvimos el reconocimiento no solamente del Concejo Deliberante sino de toda la ciudad y muy agradecidos por ello. La verdad que no nos esperábamos tantos halagos y agradecimientos porque salimos a hacer nuestro trabajo, a cumplir con nuestro deber y a la vuelta todo el recibimiento que nos dio la gente. Ahora también se sumó el Concejo Deliberante y somos nosotros los agradecidos.


No teníamos ni idea de la repercusión que tuvo el trabajo que estábamos haciendo debido a que estábamos muy enfocados en la colaboración que fuimos a prestar y cuando regresamos a la ciudad nos encontramos con mucha gente recibiéndonos, quedándonos sorprendidos porque fuimos a cumplir con nuestro deber únicamente.


Nos sentimos halagados realmente e incluso por la palabra de los concejales, no estamos acostumbrados a tantos reconocimientos porque en definitiva nuestra labor implica ayudar al prójimo.





Combate del fuego en Corrientes


Fue un incendio completamente distinto en relación a los forestales que podemos tener en Chivilcoy teniendo en cuenta las grandes dimensiones principalmente, realmente inimaginable. Una vez en el lugar nos encontramos con la realidad y las horas que lleva el poder controlarlo, se utilizan tácticas distintas a las que podemos emplear en incendios forestales registrados en nuestra ciudad.


Nos encontramos campos con mucha sequía, animales que no tenían para comer como asimismo con el avance del fuego también animales muertos, quemados. Por cualquier chispa se prendía fuego todo porque la dirección del viento cambiaba continuamente y había que estar alerta porque cuando tomaba fuego algo el incendio comenzaba a dispararse y caminaba muy fuerte.


En varias oportunidades teníamos que retirarnos esperar que cambie el viento y poder ingresar a atacarlo nuevamente. Un domingo nos pasó que fuimos a evacuar un barrio debido a que el fuego iba hacia el. Una vez que casi llega el fuego a ese lugar y con ayuda de la lluvia pudimos lograr sofocarlo en su totalidad y salvar las viviendas.

Fue un momento de desesperación porque el fuego iba hacia un barrio con algunas casas de material y otras de madera donde trataban de sacar lo que tenían dentro para llevarlo a otro lado en camiones e incluso también los animales para después ir las personas evacuando sus domicilios.

Con todas las dotaciones que estábamos en el lugar más los bomberos que llegaron de refuerzo y la lluvia, en un momento oportuno, el resultado fue óptimo pudiendo controlar las llamas antes que llegaran a las viviendas del lugar. Fue un susto muy grande pero una satisfacción poder evitar que el incendio afectara esas viviendas.


Altas temperaturas

Una vez que se apagaba un foco volvíamos a controlarlo porque era tanta la temperatura que tenía el piso que cuando agarraba algo seco volvía a prenderse. Con tanta sequía y temperatura volvían a reactivarse los incendios nuevamente. De hecho, me paso que en uno de los incendios viene el helicóptero tirando agua y teníamos que arrojarnos al piso o arrodillarnos para que si el agua caía encima nuestro no nos volteara. Apoyo la pierna en el piso y me quemo. La temperatura existente era muy grande.

Estábamos trabajando a una temperatura ambiente de entre 32º y 35º pero al estar tan seco no era lo mismo que en otros lugares. Además, al lado del fuego la temperatura era muy superior, en ocasiones no se podía estar. En las plantaciones de pino donde el fuego venía por las copas a 100 o 200 metros ya se sentía el calor de una manera impresionante de la misma forma que cuando tomaban fuego pastizales, la temperatura era superior a 50º.

Realmente soportábamos como podíamos, nos hidratábamos permanentemente, con todo el equipamiento que teníamos, el overol, los guantes, una capucha debajo del casco, las antiparras, botas y así afrontar la temperatura. Lo único que no podíamos afrontar era el humo espeso y cuando se nos venía encima debíamos salir porque si nos encerraba no se veía para ningún lado y no podíamos dejar que nos atrape porque no había escapatoria”.


La convocatoria

Cuando llega la convocatoria por intermedio del jefe que anuncia a todo el cuerpo activo que estaba la posibilidad de ir a Corrientes y si había gente disponible, fuimos los cuatro quienes nos anotamos ya que contábamos con disponibilidad laboral porque principalmente trabajamos por cuenta propia y nos podíamos organizar para poder concurrir.


La experiencia

Regresé con mucha experiencia por trabajar con Bomberos de otras ciudades que tienen un desempeño distinto al nuestro porque nos encontramos con colegas que realizan su tarea en las sierras, en el gran Buenos Aires donde no tienen incendios forestales habitualmente, con bomberos de la Policía de la Provincia con un grupo muy experimentado en incendios forestales y pudimos aprender diferentes tácticas que en Chivilcoy no utilizamos habitualmente.

Merced a la comunidad y la comisión que tenemos contamos con un excelente equipamiento y si necesitamos otra unidad la podemos pedir porque contamos con recursos tanto materiales como humanos pero en Corrientes estábamos con lo único que teníamos a mano en ese momento y debíamos arreglarnos, así lo hicimos y realizamos un buen trabajo.

Habíamos realizado cursos sobre incendios forestales para poder hacer el ataque, también para trabajar con los equipos aéreos y en esta ocasión ya no era la práctica sino la realidad así que pusimos todo lo que sabíamos para que resulte lo mejor posible y así fue. Aplicamos todo aquello que aprendimos en esos cursos de una manera efectiva.

Salimos con la idea de ayudar en aquello que se podía, una vez en Corrientes cada cosa que se salvaba significa una satisfacción muy grande o cortar el incendio en un momento justo sin que pase a mayores.

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