María Cecilia Magni:“La rehabilitación no debe detenerse, tiene que continuar. Entonces, hemos encon
- dlcchivilcoy
- 14 sept 2020
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El 10 de septiembre se celebra el Día del Terapista Ocupacional. La conmemoración de este día se estableció en el 1er. Congreso Argentino de Terapia Ocupacional realizado en La Rioja el 10 de septiembre de 1985.
Por tal motivo, entrevistamos a María Cecilia Magni quien en principio manifestó: “la verdad que es un año diferente para todas las profesiones, para todo el mundo en general. La realidad es que todos los años nosotros tratamos de hacer algún festejo, para todas las profesionales porque también se hace para el día de la Fonoaudióloga, del Kinesiólogo, de la Psicopedagoga, de la Psicóloga pero este año los festejos quedan para más adelante”.
“Igual, honrando la profesión, trabajando con todos los cuidados como debe ser, con todos los protocolos en el consultorio, en los domicilios de los pacientes, con algunos pacientes haciendo atención virtual porque son pacientes de riesgo pero trabajando igual”, mencionó, y agregó: “Acompañando a las familias porque la rehabilitación no debe detenerse, tiene que continuar. Entonces, hemos encontrado otras modalidades, otras formas y seguimos trabajando”.
“La terapia Ocupacional es una profesión que trabaja mucho con la familia, mucho con el entorno familiar, con la casa, con el hogar, con la escuela, con los distintos entornos donde el ser humano se desarrolla. Justamente en estos momentos, está todo alterado, todas las ocupaciones del ser humano están alteradas. Desde los niños hasta los ancianos”, consignó Magni.
E indicó: “Entonces, hemos tenido que hacer un trabajo en conjunto con las familias, con los acompañantes terapéuticos, con los enfermeros. En realidad, siempre trabajamos de este modo pero esta vez la familia tomó mucho más protagonismo porque al no poder ir durante un tiempo a los consultorios de tratamiento, han tenido que hacer algunas cosas ellos también, a modo de terapia dentro del hogar”.
“Con nuestras guías, con todos nuestros consejos para que no abandonen los tratamientos. Ha sido un cambio muy grande”, puntualizó.
“En las adaptaciones que tuvimos que realizar, con los nenes con autismo, la parte virtual durante un tiempo se pudo hacer pero ya después cuando pudimos tener la habilitación para atender presencial, a los papás que se animaron y que saben que nosotros cumplimos con todos los requisitos y protocolos de cuidado, empezaron a concurrir”, subrayó, y explicó: “Son terapias que necesitan de la presencialidad, del terapeuta trabajando y por ahí los chicos virtualmente nos daban un poquitito de bolilla pero después ya no”.
“Con la parte de adulto, pacientes del grupo de riesgo no concurren al consultorio, se los atiende en domicilio también teniendo todos los cuidados. Por eso, la familia, los acompañantes y los enfermeros ayudan un montón. En ese sentido, todos se pusieron la ‘pandemia al hombro’ como dicen. Todos como podemos colaboramos”, remarcó.
Asimismo, esgrimió: “Hemos visto también, muchos cambios de comportamiento en los niños por el encierro, por la falta de la escuela, la verdad que la falta de la escuela es algo que se nota muchísimo porque hay cosas que ellos no las pueden continuar si no tienen los apoyos. Es difícil y hemos estado con la familia asistiendo y seguimos como podemos”.
“Uno tiene que honrar la profesión como corresponde y como nos toque, en la situación que estemos. Hoy nos tocó esta realidad y estamos todos dándole batalla a esto”, cerró Magni.





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