Acompañamiento a municipios en el abordaje de las Buenas Prácticas en la Gestión de Fitosanitarios

Durante 2022 continuarán las actividades del Proyecto Local aborda una de las principales demandas del territorio relacionado con la gestión de fitosanitarios en el norte bonaerense.
Se apoya iniciativas municipales, promoviendo la legislación provincial y local, compartir experiencias de ordenamiento y armado de ordenanzas y gestión de los territorios. Entre las actividades del proyecto se acompañará al Establecimiento Don Santiago, donde funciona la Unidad Demostrativa Agrícola INTA Chacabuco, en una gestión integral de Buenas Prácticas Agrícolas, de modo que el sector productivo pueda contar con un modelo que se comparable con la actividad en la región.
En la ciudad de Chacabuco, profesionales, aplicadores y estudiantes de agronomía compartieron una jornada destinada a conocer la Ley Provincial de Agroquímicos, así como los pasos de la Receta Agronómica Obligatoria y el funcionamiento del Centro de Acopio Transitorio. Además, Chacabuco cuenta con una ordenanza que regula las aplicaciones de agroquímicos y estable un ordenamiento territorial, con lo que la actividad generada por el INTA permitió al público contar con mayor información sobre el tema.
Similar actividad tuvo lugar en Mercedes y finalmente, en Junín, ya cerrando el 2021, Luis Carrancio de INTA Oliveros compartió en una jornada organizada en conjunto con la Asociación de Ingenieros Agrónomos de Junín, aspectos técnicos, normativos y de abordaje de las aplicaciones en las zonas periurbanas. En un distrito donde comenzaron a generarse tensiones por aplicaciones lindantes con viviendas, la actividad permitió a los profesionales y entidades agropecuarias conocer los principales aspectos a tener en cuenta en una gestión eficiente de fitosationarios y, además, los criterios que se emplearon en el sur de Santa Fe para regular las aplicaciones y su control.
Entre los principales aspectos a tener en cuenta, se recomienda determinar zonas de restricción y amortigüamiento, diseñar un sistema que reduzca la dependencia de insumos químicos, pulverizar sólo si es estrictamente necesario y utilizando la alternativa que conlleve menor toxicidad, y posibilidades de evapotranspiración. Las Buenas Prácticas de aplicación, relacionadas las cuestiones climáticas adecuadas, maquinaria y velocidad de trabajo, entre otras, deben respetarse en todo el territorio, y con mayor rigurosidad en las áreas de amortigüamiento. La implantación de cortinas forestales son un complemento necesario, el uso de la ropa adecuada para evitar la contaminación del personal que trabaja en las aplicaciones, principalmente en la preparación de las mezclas. Finalmente, con relación a las ordenanzas, para su funcionamiento es clave su cumplimiento estricto y contar con la figuar de un veedor.
El INTA, en este escenario, donde intervienen no sólo actores productivos, sino organizaciones sociales y vecinales, cámaras profesionales y los Estados Municipales, pone a disposición sus trabajos de investigación generados en las Estaciones Experimentales, a través de ensayos y charlas técnicas; y los recursos de las Agencias de Extensión Rural, ya sea en la generación de actividades de capacitación, la captación de demanda o la promoción de ámbitos de trabajo multiactorales.