EFEMÉRIDES DEL MES DE MAYO: 17 DE MAYO DÍA DE LA ARMADA NACIONAL

El Combate de Montevideo

Todos los 17 de mayo se conmemora el día de la Armada Nacional en recordación del triunfo naval que obtuvo nuestra escuadra al mando del almirante Guillermo Brown contra los realistas en el combate de Montevideo. Cuyas acciones se desarrollaron entre el 14 y el 17 de mayo de 1814.

Cuando se produjo la Revolución de Mayo, la ciudad de Montevideo que dependía de Buenos Aires, no se sometió a la autoridad de la Primera Junta ni a la de los demás gobiernos que le sucedieron. La Revolución contó con la adhesión de los habitantes de la campaña de la Banda Oriental (actual Uruguay), pero en Montevideo residían muchas familias españolas y además estaba el apostadero naval español. Motivo por el cual la ciudad se convirtió en un foco de resistencia contra las autoridades de Buenos Aires. Mientras Montevideo estuviera en poder de los españoles, dicha ciudad podía convertirse en una “cabeza de playa” desde donde una expedición española podía lanzar un ataque directo sobre Buenos Aires y poner en peligro a la revolución e incluso aplastarla. Por ello era necesario ocupar esa plaza.

Un primer intento de ocupar la ciudad había fracasado entre 1810 y 1811. Las fuerzas independentistas pusieron nuevamente sitio a la ciudad en 1812, pero era imposible conquistarla, si previamente no se destruía su flota. De nada servía tenerla sitiada por tierra mientras subsistiese la flota española, la cual incursionaba en nuestros ríos interiores atacando nuestras costas y llevando provisiones a la ciudad sitiada. También podía ser abastecida con pertrechos desde Brasil o directamente desde España.

En 1814 la situación se había agravado porque Napoleón había sido vencido y el rey de España Fernando VII había recuperado su trono. El rey estaba dispuesto a lanzar un contraataque contra los movimientos independentistas y Montevideo era en esa circunstancia un punto estratégico. Conservar esa base era esencial para España para atacar a Buenos Aires. En ese momento gobernaba las Provincias Unidas el Director Supremo Gervasio Posadas. Cuando el gobierno revolucionario se enteró que en España se estaba preparando una expedición de 10.000 soldados que al mando del general Morillo sería enviada a América para aplastar a los movimientos independentistas; se hizo urgente la necesidad de crear una flota que pudiera enfrentar a la de los realistas y sitiar Montevideo por el río para forzarla a rendirse.

Juan Larrea el ex vocal de la Primera Junta, fue designado ministro de Hacienda y encargado de reunir los recursos para crear nuestra escuadra. Una vez creada se le confió el mando de la misma a Guillermo Brown. Nuestra flota estuvo integrada por la fragata “Hércules”, la corbeta “Zephyr”, el bergantín “Nancy”, las goletas “Juliet” y “Fortuna”, más otras embarcaciones menores compradas a comerciantes ingleses o porteños. A las que se sumaron otras que se les habían tomado a los españoles. A toda prisa hubo que artillarlas y entrenar lo mejor posible a sus tripulaciones en una carrera contra reloj. Brown introdujo el sistema de señas mediante el uso de banderas que habían inventado los ingleses. Esa era la manera de comunicarse entre naves en aquella época, es decir mediante señales. Una primera victoria se obtuvo al tomar por asalto la isla Martín García, donde los españoles tenían instalada una batería de cañones y contaban con el apoyo del capitán de navío Jacinto Romarate que comandaba una flotilla. Después de la victoria de los criollos Romarate se internó en el río Uruguay quedando aislado de Montevideo. Brown envió algunas naves contra él, pero Romarate las venció en Arroyo de la China (Entre Ríos), no obstante, no pudo acercarse a Montevideo porque parte de nuestra flota le cerraba el paso. Brown se concentró en Montevideo que era la presa mayor.

Ciudad a la que puso sitio por el lado del Río de la Plata el 19 de abril de 1814. Con lo cual la ciudad quedó completamente rodeada. El general Alvear ya la tenía sitiada por tierra. En Montevideo la situación se agravó como consecuencia del sitio. Comenzaron a escasear los alimentos, aparece un foco epidémico que se propaga rápidamente y se multiplican los menesterosos. Ante tan grave situación el 14 de mayo la flota española sale a romper el bloqueo. Ese día once buques, un falucho y veinte lanchas armadas salen a enfrentar a las ocho naves y un falucho de nuestra escuadra. Brown simula una retirada hacia el puerto del Buceo. Allí da la orden de virar y enfrentar al enemigo. Esta maniobra toma por sorpresa a los españoles. Ambas flotas libran combates individuales unas contra otras hasta que cae la noche. Amparadas en la oscuridad las naves españolas se retiran. El día 15 no pudieron combatir porque un temporal lo impidió, pero el 16 se reanudan las hostilidades. La escuadra criolla abre fuego contra un bergantín español. El retroceso de un cañón le provoca una fractura en una de sus piernas a Brown, que se hace curar en cubierta y entablillado, recostado sobre una camilla, continúa dirigiendo las acciones, mientras silban las balas de fusilería. La lucha se generalizó el 17 de mayo entrando en acción todas las naves de ambos bandos. La escuadra independentista se bate en retirada, navegando mar adentro, perseguida por la flota española. No huyen en línea recta, sino trazando una semicircunferencia para situarse entre las naves españolas y Montevideo. La táctica de Brown dio resultado. La flota española quedó sin la protección de los cañones del fuerte de Montevideo. Luego Brown ordena abrir fuego contra ellas con todos los cañones. Al finalizar la jornada el triunfo es de los independentistas. Cinco naves realistas son capturadas, dos fueron destruidas, otras encallan y se toman quinientos prisioneros. Mientras que la escuadra de Brown ha sufrido la pérdida de un buque, la muerte de cuatro hombres y algunos heridos. Montevideo se vio obligado a rendirse el 14 de junio de 1814. Alvear entró en la ciudad el 22 de junio y Romarate sin tener una base donde reabastecerse se rindió un mes más tarde. Con lo cual terminó el dominio español en la región del Río de la Plata.

Las consecuencias de esta victoria fueron muy importantes: alejó el peligro de una reconquista española, se tomaron numerosos prisioneros y un muy importante arsenal que permitió equipar a los ejércitos criollos que luchaban por la libertad. Brown y sus hombres fueron reconocidos como héroes.

Rubén Osvaldo Cané Nóbile