Natalia González: “La salud mental, pos pandemia, en nuestra sociedad”

Natalia González, referente social de nuestra ciudad y miembro del Partido del Dialogo que integra la alianza Juntos, manifestó su preocupación y la necesidad de buscar herramientas para lograr tender soluciones a lo que es hoy en día es un tema sumamente alarmante, la salud mental en general, debido a que con la pandemia los problemas se acentuaron y agudizaron en cada rincón de nuestra ciudad.

“Estos problemas se ven agravados en los barrios vulnerables, ya que en estos contextos dónde la mayoría de los derechos son infringidos, la salud mental no es la excepción, y lamentablemente son realidades naturalizadas.

La mayoría de las familias no llegan a fin de mes y deben reinventar su rutina para poder sobrevivir. Están bajo el índice de pobreza y en condiciones de indigencia. Obviamente que los temas de salud mental recaen a un tercer plano, y muchos no comprenden el concepto de salud de una manera integral.

En los mejores de los casos realizan la consulta, cuando la afección física les impide realizar sus tareas diarias.

Durante la Pandemia, el eslogan " yo me quedo en casa" en estos contextos significó para muchas mujeres y niños, quedarse con el agresor y/o abusador dentro de su hogar, con todo lo terrible que esa situación implica. Si bien la violencia intrafamiliar, la violencia de género, el consumo problemático, los abusos son transversales a la sociedad en general, en estos contextos, la falta de recursos, oportunidades y herramientas , hace mucho más difícil el acceso al sistema de salud mental, teniendo en cuenta en colapso del sistema público

Hay que tener en cuenta que estás familias no cuentan con los recursos necesarios para la realización de una consulta con un especialista en salud mental, y cuando les llega el día del turno, en el servicio público, suele ser demasiado tarde.

Es necesario una planificación integral para abordar estás problemáticas y entiendo que es una realidad que hay que darle visibilidad, porque es el puntapié inicial para comenzar el abordaje.

Es sorprendente ver mucha veces ignoramos lo que sucede en estos extremos de nuestra ciudad. Hay que destacar el trabajo de las ONG y de la comunidad religiosa en estos contextos. Los vínculos que forman está instituciones hace que las familias se sientan valoradas, acompañadas, y obviamente esto colabora de manera muy favorable en el aspecto de salud mental. Muchas veces son ellos los que logran, a través de sus contactos y de los profesionales con los que cuentan la atención primaria en salud mental.

En este último tiempo, Chivilcoy ha sido noticias por varios suicidios, esto como sociedad nos tiene que llevar a una reflexión profunda, y meditar que nos está pasando en lo medular. Cómo personas debemos entender que no somos seres aislados, vivimos en comunidad, y lo que al otro le pase nos afecta directamente.

Muchas veces una escucha activa, sin juicio, una tarde de charlas y encuentros, hace que las personas se puedan abrir y poner en palabras lo que les está pasando, y de esa manera poder abordar primariamente la problemática.

Debemos fomentar más espacio de encuentros, de contención donde las personas se sientan valoradas y acompañadas, desde lo micro, desde lo cotidiano.

Hay mucho por seguir trabajando, creando herramientas y políticas públicas de oportunidades e igualdad”.