Robaron su motocicleta y después la quisieron estafar aduciendo su restitución.

Los robos de motocicletas continúan en la ciudad de acuerdo a la denuncia de los vecinos a través de las redes sociales. Aunque no solamente que sustraen la moto si no que también intentar estafar a personas damnificadas a través de una supuesta devolución pero solicitando dinero a cambio de tal restitución con ‘un adelanto por transferencia’.

En las últimas horas, la vecina Euge Zunino posteó a través de las redes sociales “le acaban de robar la moto a mi hermana en el Club Independiente (estaba entrenando y cuando salió no estaba más). Se trata de una Gilera Smash. En la baulera tenía una agenda con datos importantes.

Asimismo, en el transcurso de la semana, Susana Tripulillo, quien trabaja en una cooperativa de trabajo, con media jornada, denunció que le sustrajeron una moto “Gilera 110 c.c. Smash, gris y negra”.

Además, a la ciudadana Gisela Zaccardi, que tiene un almacén de barrio en la calle 94 Nº 269 y realiza habitualmente delivery a sus clientes. Autores ignorados, le sustrajeron su motocicleta estacionada frente a su comercio en la casa de su mamá.

Como si esto fuera poco, no solamente que varios vecinos resultaron damnificados por el robo de sus motocicletas si no que también ahora delincuentes pretenden aprovecharse de esta desagradable situación que le toca atravesar a varios ciudadanos que le quitan su bien y pretenden estafarlos aduciendo una posible devolución de su motocicleta aunque abonando un dinero a cambio.

A respecto, Carla Sólimo advirtió a través de sus redes sociales: “no respondan ni transfieran un peso si les roban la moto o lo que sea porque están haciendo nuevas estafas aprovechando la situación...no se de donde sacan los teléfonos pero mientras hacíamos la denuncia nos llamaron.

Son estafas no caigan!, no transfieran un peso!, no es verdad que tienen tu moto”.

Cuando estaba siendo la denuncia la llamaron a tu teléfono personal desde un Número Privado aduciendo la persona que se comunicó con ella tener su motocicleta debido a que es responsable de un desarmadero y ‘un delincuente se la vendió diciendo que la motocicleta era propia’.

No obstante, cuando el supuesto propietario del desarmadero se entera que era robada decide contactarse con su dueña (en este caso la vecina de Chivilcoy) con el propósito de restituir la moto aunque cobrándole una suma de $ 30 mil, dinero que él ‘pagó al delincuente para comprarle la moto’. El hombre que la llamó por teléfono ofreció llevársela a la puerta de la comisaría si la vecina contaba con los $30 mil pero antes necesitaba un adelanto y le solicitó una transferencia de $ 10 mil para la movilidad. Cuando la vecina dijo que no iba a transferir dinero si no que le daría los $ 30 mil en mano, el hombre cortó la comunicación.